Estos son días de volver a las rutinas. Septiembre marca cada año el inicio de un nuevo curso y con él el principio de una nueva etapa para muchos niños. No es fácil para ellos, como tampoco lo es para nosotros los padres. Por eso necesitamos un periodo de adaptación a la escuela y a las novedades que comporta. El periodo de adaptación escolar es una fase por la que todos los niños sin excepción pasarán a lo largo de las siguientes semanas, unos con más facilidad que otros.
Veamos en qué consiste este periodo de adaptación escolar y qué es lo que podemos esperar que ocurra con nuestros hijos más pequeños, aquellos que entran por primera vez en el cole o los que cambian de etapa, pero también para los que cambian de cole o a los que les suele costar volver a empezar.
El periodo de adaptación escolar es un proceso durante el cual el niño se integra a la escuela y termina cuando asiste a ella con normalidad.
Esto significa que nuestros hijos:
- necesitan aprender a convivir con un adulto (tutor/a) que no es su figura de apego o educador habitual (madre/padre/abuelos);
- que debe aprender a relacionarse y ser aceptado por un grupo de niños y niñas a los que no conoce y que formará parte de sus grupo de iguales;
- que debe separarse de casa, el lugar que conoce y se siente seguro, para aprender a moverse por unos espacios desconocidos y que poco a poco tendrá que aceptar y hacerlos parte de su día a día;
- que debe aprender nuevas normas y rutinas, muy probablemente diferentes a las que hasta hoy tenía;
- que necesita aprender a utilizar nuevos materiales y formas de trabajar con ellos;
- …
¿Qué podemos observar o esperar durante este periodo de adaptación escolar?
Es común que lloren cuando deben volver al cole y que nos digan una y otra vez que no quieren ir. Dejar que nos expliquen qué les pasa y porque no quieren ir ayudará a que se sientan comprendidos y por tanto mucho mejor. Decir que no lloren es una negación de sus sentimientos y por tanto una forma de ignorarles. Debemos dejar que se expresen, que lloren lo que necesiten y ser capaces de transmitir la sensación de que el cole es un lugar seguro, un sitio donde poco a poco irá conociendo a nuevos amigos y un lugar donde podrá aprender junto a otros niños y niñas como él.
Los síntomas del periodo de adaptación escolar son distintos de un niño a otro, incluso entre dos hermanos, por lo que unos los acusarán más que otros. La recomendación es tener paciencia a raudales y ser tan compresivos como nos sea posible, éstos son momentos que nuestros pequeños necesitan más que nunca sentirse apoyados y comprendidos.